Ya hacía tiempo que no hacíamos un recorrido con los
senderos más clásicos que en su día dieron vida a este grupo. Durante mucho
tiempo formaron parte de las rutas habituales aunque hoy las tenemos algo olvidados.
El pasado viernes, en una cena ciclópata de verano aprovechamos para planificar
la ruta del domingo y con las aportaciones de unos cuantos la hemos completado.
Hoy nos hemos juntado nada menos que 9 personas humanas
capaces de gobernar una bici. Partimos del polideportivo de Premià de Mar
Batxi, Norris, Adolfo, Víctor, Kiler, Quique y Racing con la presencia de Diego
y Yann. Diego ya ha salido en muchas ocasiones con nosotros y hoy Yann se
estrenaba con nosotros.
Partimos hacia Teià para subir por su riera y en vez de
tomar el camino habitual hacia el GR, hoy decidimos subir por el Cristo, creo
que por primera vez en 3 años. La subida se las tiene y con un día caluroso
como el de hoy ya causa los primeros estragos en el pelotón, mucho sudar y
mucho apretar los dientes, tanto para subir hasta el Cristo como para luego
remontar hasta el mirador, ya en el GR.
Con el precalentamiento hecho nos dirigimos hacia Sant Mateu
para ir a buscar un sendero, con un tramo de pista y posterior trialera hasta
encontrar el sendero Ciclópata por excelencia, la “V”, que tomamos dirección
Can Guguí. Luego hacemos un sendero nuevo de bajada que nos acerca al que va a
buscar el de las fuentes de Santa Anna y San Joaquin en el cual encontramos
muchas ramas y troncos por el camino, como si el propietario de las tierras quisiera
impedir el paso de las bicis.
Una vez en la riera de Vallromanes bajamos hasta la plaza
del pueblo donde reponer agua de la fuente y descansar unos minutos antes de
proseguir hacia otra trialera clásica, la del Arbol caido, donde debemos
detenernos unos minutos tras una caída y un pinchazo sin más consecuencias de Víctor.
Luego tocaba subir de nuevo, esta vez por la Puerta Verde, que empieza en las
inmediaciones de Can Nadal y que en su primera parte ha sido barrida y allanada
por una máquina, aunque el destrozo no ha sido demencial pues el paso de las
motos la había dejado casi impracticable y ahora está en buenas condiciones y
volverá al estado que nos gusta en pocos meses en cuanto la vegetación la
vuelva a recubrir.
Camino de la Mutua descansamos un rato por pista después de
descubrir un nuevo atajo hasta la pista desde el inicio (hoy final) de la puerta
verde y tomar dirección Argentona para girar a la derecha por nuestro querido
Rocódromo, un sendero variado, con muchas piedra, que pasa por un precioso
mirador por donde obsequiarse con una vista al Castillo de Burriac y llegar
luego hasta la pista que va hacia el castillo desde Argentona, aunque nosotros
tenemos otros planes.
Atravesamos la pista para empezar otro fetiche Ciclópata, el
camino a Mordor, bajando por entre el bosque, sorteando raíces y escalones en
un terreno muy seco hasta encontrar un sendero estrecho que por entre el bosque
nos acerca a Cabrera de Mar hacia donde nos dirigimos bajando por el sendero de
Rosa.
Poco más de 1.000 metros de desnivel en treinta y tantos
kilómetros es lo que ha dado la mañana de este domingo soleado.
para la calor ya se sabe..salidas tempranas o terracitas de verano jajaja.
ResponEliminalo de fetiche me a gustado,yo tambien soy fetiche de sendas y pistas.
venga chicos a por el siguiente reto ciclopata.
un abrazo