Recorrido:
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Salida desde Premià de Mar hacia Cabrils para
subir por el interior de la Mutua.
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Bajamos por la trialera de la cadena que hay
enfrente de la subida final, junto a la Mútua. Sin desvíos, todo recto hacia
abajo. La trialera está en buenas condiciones a excepción de un par de puntos
donde hay que ir con cuidado y poner pie en tierra.
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Tomamos la pista que nos lleva hacia Orrius y tomamos
el sendero que sale solo atravesando la carretera. Subimos y cogemos la
trialera de la derecha hasta el final donde hay un depósito de agua y giramos a
la izquierda.
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Un poco más adelante volvemos a girar a la
izquierda por un cortafuego en bajada bastante vertical hasta encontrar un
sendero a la izquierda que nos lleva por diferentes cruces de pista y senderos
y con velocidad alcanzamos la pista que viene del Bell Recó.
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Seguimos la pista hasta el final, debajo de la autopista
C60 y tomamos el sendero que surge detrás de las vallas dirección el Coll de
Parpers, el sendero es bonito, con solo un par de palmos de ancho hasta
encontrar un desvío y decidimos ir a la izquierda, por donde bajamos un día con
Pelayo.
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El sendero es muy bonito, fresco y en un momento
determinado decidimos subir un terraplén a la izquierda donde nos encontramos
con otro sendero que serpentea por el bosque y promete hasta que deja de
hacerlo y desemboca en una pista con fuerte pendiente que nos lleva hasta la
cima de la urbanización Sant Carles.
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Nos dirigimos hasta la gasolinera fantasma,
sacacorchos tras atravesar la carretera y sendero paralelo a la pista de
regreso. Paramos a descansar y comer unos minutos y en vez de ir directos hacia
Sant Bartomeu hacemos una subidita a la derecha para enlazar con otra pista que
va hacia el Meridià Verd, la pista que sube desde La Roca.
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A medio camino de esta pista sale a la derecha
un sendero que poco a poco se convierte en una larga trialera de bajada,
rápida, preciosa para mis gustos, con tramos fáciles combinados con otros de
mayor cuidado y que termina en un sendero que bauticé en su día como el de los
perros. Un sendero agradable en falso llano poco a poco nos lleva al Meridià Verd.
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Atravesamos la pista y tomamos un sendero que
parte justo delante y que enlaza con otro que nos lleva hacia la carretera que
va de La Roca hacia Orrius, por debajo del elefante esculpido, la atravesamos e
iniciamos una de las partes más entretenidas con senderos llenos de piedras,
otros tramos más rápidos y que nos llevan hasta desembocar en la Pedra de l’Oreneta.
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En la Pedra de l’Oreneta ni paramos y ponemos
plato pequeño para el plato fuerte del día, la subida por esta trialera de
piedra viva que exige fuerza y habilidad, que pasa por el Dolmen de Cèllecs y
que nos remonta hasta Sant Bartomeu. Sin duda una gozada de trialera de la que
nunca me canso.
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Ya en la pista regresamos hasta la Roca d’en
Toni, bajamos con alguna variación por la Granota y enlazamos en la Pared Seca
con la trialera del Cactus para terminar con una buena cerveza en Can Rafart,
en Vilassar de Dalt donde se nos une Norris y familia, esperamos pero la
anunciada visita de la Bamba Negra no se produce L
Por suerte, este domingo no ha habido incidencias que
remarcar, parece mentira, pero aunque lo ha intentado, Quique no ha caído ni
una sola vez. Han sido 50 Km. redondos con 1.210 metros de desnivel positivo en
3:40h. de pedaleo con una excelente compañía, y tramos de auténtico MTB
extremo, subir esas enormes rocas con inclinaciones del 70%, sintiendo la
tracción de las ruedas, pegadas al granito, los bíceps femorales tensionados y
los gemelos a punto de explotar no tiene precio.
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