Primera salida de invierno y aparece Kiler Bike, ¿le han
echado de la cama? Algo así debe haber ocurrido para que un friolero como él se
atreva después de tanto tiempo en probar el monte y venir un domingo con nosotros.
Junto a él nos reunimos Batxi, Norris, Quique, Adolfo y Racing para quemar algo
de calorías antes del atracón navideño.
El día antes Juacs, sin quererlo, nos había picado por si
conocíamos una trialera imposible que bajaba por la zona de la Cadire del
Bisbe, así que ni cortos ni perezosos nos dirigimos a subir por la Cadira para
reconocer el terreno, guiados por el GPS humano, Kiler bike remontamos las
interminables rampas que salen desde Premià de Dalt.
Una vez en la pista de la Cornisa, la cruzamos para ir hasta
la misma hermita de Sant Mateu, un lugar emblemático por donde curiosamente
casi nunca pasamos. Bajamos hasta la fuente y seguimos un centenar de metros
hasta una trialera, por donde empieza el Vietnam, que nos deja en otra pista
que seguimos a mano izquierda para ir a buscar una trialera que desemboca en la
V. Allí hacemos esta trialera, la más famosa de entre las Ciclópatas, esta vez al
revés hasta encontrar la trialera de los puntos, esa que discurre por entre el
bosque y cuyo recorrido está delimitado por marcas en forma de puntos pintados
en los árboles.
Llegamos a la pista que viene de Can Boquet para bajar unos
metros y tomar un desvío a la izquierda, primero por pista ascendente y luego
por un sendero que sale a mano derecha, típico de muchas ediciones de la
Trinxacadenes. Seguimos el sendero hasta aventurarnos por un desvío que no
habíamos hecho nunca, este nos lleva hasta un lugar sin salida pero pronto
vemos un sendero muy estrecho que se deja disfrutar y que nos lleva hasta un claro
donde queríamos llegar para iniciar una bajada hasta la riera de Vallromanes.
Allí se despide Kiler bike quien ya ha quemado suficientes
calorías y regresa por pista, el resto remontamos dirección Can Gurguí con la
intención de seguir el sendero de las fuentes de San Joaquin y Santa Anna, pero
recordando que el recorrido pasa por un puente muy resbaladizo y con la humedad
reinante decidimos que no es lo más aconsejable, así que seguimos un tramo más de
pista hacia arriba para tomar un sendero que nos lleva por encima de las
fuentes hasta el lugar deseado.
Allí paramos un rato a comer algo mientras inspeccionamos la
bici de Batxi que hace más ruido que una rana en época de celo, con unos
constantes croc, croc, de origen desconocido, pero no hay manera, la rana sigue
dentro. Remontamos el desnivel que nos queda hasta Can Gurguí y llegamos a la
Cornisa donde descendemos un poco por la trialera del Ovni hasta el Pla de Teià
donde Batxi se despide. El resto subimos por la Cornisa, pasamos por el mirador
donde admiramos las bonitas vistas de un día despejado como el de hoy y
terminamos subiendo los últimos 100 metros para encontrar el inicio del sendero
que nos llevará hasta la zona del Serviol con la trialera que nos indicó el
Juacs.
La trialera tiene diferentes partes, es estrecha, a veces
muy estrecha, con muchas raíces y escalones y con tres pasos muy comprometidos
donde tenemos que poner pie a tierra, aunque en uno Norris se lanza y acaba por
el suelo, luego le imita Quique que ya echaba de menos el caerse. Entre pasos
estrechos, con el precipicio al lado y más de uno ciclable, pero técnicamente
de buen nivel, vamos descendiendo hasta ver que la trialera se convierte en un
sendero sucio pero divertido que nos deja en la pista, muy cerca de Premià de
Dalt.
Paramos en el pueblo para seguir nuestro protocolo en la
soleada y agradable terraza de la Societat Cultural Sant Jaume, donde no
parábamos al menos desde hace 2 años. Así que degustamos la cerveza y las
bravas con tiempo para arreglar el mundo y criticar a más de uno.
Ha sido una salida corta pero intensa, solo ensombrecida por
los amagos de calambres de la pierna derecha de Norris, que parece no soportar
dos días seguidos de bici. Mucho queda de temporada para preparar alguna locura
en primavera donde poder rendir a buen nivel y dejar alto el pabellón Ciclópata.
Por cierto, hoy no se presentó Víctor, acosado del mal del noctámbulo, y es que
no se puede estar en misa y repicando, la juega y desenfreno nocturnos
no son compatibles con las salidas Ciclópatas, es necesaria una vida monacal para ello, al menos para los mortales.
El viernes 27 de diciembre queda convocada la reunión anual
de Navidad de los Ciclópatas donde dar rienda suelta a los recuerdos de las salidas
de 2013 que ya se acaban y empezar a planificar pequeñas locuras para 2014.
Allí nos vemos!
Enlace al track de hoy.
Buena salida, como siempre, típico de vuestro grupo. Un placer poder leer semana tras semanas vuestra crónica. Un abrazo grande y nos vemos en la montaña!
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